Hotel & Restaurante La Gerencia - Checa, Guadalajara

jennifer G.

Al llegar nos llamó la atención la ubicación muy tranquila y lo que más nos sorprendió justo desde una de las terrazas del hotel se ve la cascada y desde el mismo hotel puedes ir andando a aguapeñas que es precioso de visitar y muy tranquilo.
La habitación bastante amplia y muy limpia , pese al frió que hacía fuera en el hotel se estaba perfecto .
El servicio del restaurante nos pareció genial pese a que el dueño el pobre tiene que estar en todo el el bar , en el restaurante y en la recepción , pero aún así cenamos y desayunamos de 10 el es muy atento .
Lo recomendamos muchísimo.

MIGUEL A. C. H.

Seré honesto.
La simpatía del propietario no es el fuerte del hostal, pero eso no justifica los comentarios que he leído en otras reseñas. El trato recibido fue parco en palabras pero en todo momento educado en las formas. El servilismo no está incluido en el precio, que por otro lado, me ha parecido correcto. Habitaciones limpias con camas bastante cómodas. La individual tiene unas vistas excelentes, aunque en general noté un olor a humo de leña por todas partes.
Interesante iniciativa la de tener una mini biblioteca de novelas clásicas a disposición de los clientes. Es digno de mención.
Del restaurante no puedo opinar pero pedimos unas tapas en el bar y estaban bien, con un precio apropiado.
En definitiva, es un lugar adecuado para pasar un par de noches en tu visita por esta zona tan bonita y desconocida por muchos, como es el Parque Natural del Alto Tajo.

Susana G. L.

¡Que experiencia más bonita! Encontramos este hotel rural de casualidad, y qué maravilla! Las habitaciones súper bien equipadas, camas cómodas y muy buena limpieza en los baños, el hotel en sí cuidado con mucho mimo, aunque afuera hiciese mucho frío dentro del hotel se podía ir en manga corta, el restaurante fantástico y el pueblecito con mucho encanto para pasear en familia. Lo mejor de nuestra estancia, la atención y el cariño de Eduardo. Viajamos con nuestros dos hijos pequeños y nos ayudó en todo y más, incluso refrigerando comida de la bebé en la nevera del hotel.
Muchas gracias por todo, hemos estado como en casa.
¡Nos vemos pronto!❤️

Jose M. G. A.

Reservamos el hotel por la ubicación únicamente. El mismo día de ir vi algunas reseñas negativas y me temía un mal servicio, nada más lejos de la realidad. Veo los comentarios negativos injustificados, la atención de los propietarios, tanto de él en la recepción como el de ella en el restaurante fue impecable.

La habitación es sencilla pero limpia, el precio a mi juicio es el correcto, lo mismo digo por el restaurante (en el que cenamos esa noche), la comida por cierto, casera y estaba muy buena.

Tomás B. G.

Grata sorpresa encontrarse este hotel en Checa, donde acaba una de las etapas del Camino del Cid. Estuve recorriendo en bicicleta de montaña el tramo de las Tres Taifas a mediados de octubre y dormí estupendamente en una habitación amplia y limpia. Me guardaron la bicicleta en un almacén y cené de lujo, con una variedad de platos caseros que me sorprendió. El trato fue muy bueno y correcto. Me sellaron el salvoconducto y desayuné la mañana siguiente antes de seguir la ruta hacia Albarracín. Los alrededores son espectaculares, con el Alto Tajo y sus grandes bosques de sabinas, pinos y cañones. Al lado, Chequilla y sus bloques de arenisca son visita obligada.

Alicia P.

El restaurante muy bueno.Después de leer todas las reseñas malas que tenía estábamos un poco aterrorizados pero teníamos que esperar a que arreglarán nuestro coche y era el único lugar donde podíamos comer. Pedimos crema de verduras y caracoles de primero. De segundo churranco y bacalao. Todo muy bueno y servido en un tiempo razonable

Mª I. R.

Mi reseña se basa únicamente en el restaurante. Desconozco el hotel.
Resalto las malas formas del señor que supongo será el que regenta el local. Mal educado y muy antipático. Nos sentábamos a comer a las 14:30 h. y las campanas de la Iglesia nos marcaron las 15:00; las 16:00 y las 17:00 horas. Nos había pedido paciencia y no me negareis que paciencia tuvimos. La comida normal y cara. Nos servía una joven a la que se veía agobiada, ya que era la única persona para atender todo el restaurante. Lástima de atención, ya que el sitio es inmejorable, con una terraza preciosa, totalmente vacía.
Evidentemente no volveré ni aconsejaré a nadie ir allí.

Luis A. M.

¡Entrar a este hotel es como sumergirse en un oasis de cordialidad cósmica! El dueño del lugar, cuya amabilidad roza lo sobrenatural, te recibe con una sonrisa tan resplandeciente que podrías creer que el sol se apaga a su lado. Desde el primer segundo, te atiende como si fueras el único ser humano en el planeta, dispuesto a hacer lo que sea necesario para garantizar que cada minuto de tu estancia sea un sueño hecho realidad.

En resumen, la cordialidad alcanza cotas tan épicas en este hotel que estar aquí es como haber sido transportado a una dimensión paralela, donde la atención es tan perfecta que desafía la lógica humana. ¡Un verdadero paraíso de la hospitalidad!